Es necesario salir al encuentro de los padres de familia en materia de educación: Corral Merino
Eugenio Amézquita
Con una asistencia de más de cuatrocientas treinta personas, provenientes de veinte Estados de la República, se llevó a cabo el II Encuentro Nacional de Educación en las instalaciones y colaboración de la Universidad Pontificia de México, en un ambiente de fraternidad, diálogo y reflexión con los distintos actores de la educación en el País, entre otros, rectores de universidades, directivos de escuelas, autoridades civiles, maestros, padres de familia, investigadores y representantes de la sociedad civil.
El Pbro. Eduardo Corral Merino, secretario ejecutivo de la CEM para el tema de Educación, señaló que la convocatoria para este Encuentro, tuvo por objetivo "Abrir un espacio de diálogo y encuentro con los distintos protagonistas de la educación, para discernir sobre los actuales paradigmas y procesos educativos, en el contexto de la legislación mexicana reciente así como de la convocatoria que el Papa Francisco ha realizado para conformar un Pacto Educativo Global.
El discurso de inauguración estuvo a cargo del Eminentísimo Señor Cardenal Carlos Aguiar Retes,
Arzobispo de México y Gran Canciller de la Universidad Pontificia de México, en el que de manera puntual ofreció una síntesis del tema de la educación en el Magisterio Universal, Latinoamericano y de la Conferencia del Episcopado Mexicano, reciente.
Enseguida, se transmitió en video un mensaje del secretario de Educación, el Lic. Esteban Moctezuma Barragán, en el que, entre otros aspectos, mostró su alegría por la convocatoria que el Papa Francisco realizó en el mes de septiembre pasado, para llevar a cabo un Pacto Educativo Global en el año 2020. Posteriormente, Mons. Enrique Díaz Díaz, Obispo de Irapuato y Responsable de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la CEM, leyó un mensaje de su Eminencia, el Señor Cardenal Giuseppe Versaldi, Prefecto de la Congregación para la Educación Católica de la Santa Sede, así como del Secretario de la misma, el Señor Arzobispo Angelo Vincenzo Zani. En éste, además de mostrar su beneplácito por este Segundo Encuentro, felicitaron a la asamblea reunida y desarrollaron tres aspectos fundamentales de la educación hoy: la centralidad de la persona humana, la necesidad de enseñar a vivir su dimensión trascendente y renovar la pasión educativa en diálogo con las nuevas generaciones.
Acto seguido se tuvo un primer diálogo en el que participaron el Dr. Leonardo Curzio Gutiérrez,
Historiador y Sociólogo, Analista y Conductor de radio y televisión, y el Pbro. Dr. Mario Ángel Flores Ramos, Rector de la Universidad Pontificia de México. Esta mesa se caracterizó por ofrecer un
listado de retos fundamentales para la educación en este momento histórico cultural concreto.
Por la tarde se tuvo un primer panel titulado “Reflexiones generales sobre la educación, hoy”,
desde tres distintos ámbitos: el académico, de la sociedad civil y el eclesial, moderado por el
Obispo Auxiliar de Monterrey, Mons. Óscar Tamez Villarreal. Los tres panelistas: Dr. Juan Martín
López Calva, Mtro. David Calderón Martín del Campo y el Pbro. Dr. Carlos Sandoval Rangel,
coincidieron en señalar que la educación hoy debe ampliar su objetivo y profundizar aún más su
sentido, en tanto que estamos en un Cambio de Época.
En un momento final de la tarde, se llevó a cabo el panel: "Estado de la legislación actual en México. Reciente reforma al artículo 3o Constitucional y nuevas leyes secundarias en la materia", en el que participaron la Lic. Beatriz Paredes Rangel, Senadora de la República; el Mtro. Juan Carlos Romero Hicks, Diputado Federal y el Pbro. M. en C. Eduardo Corral Merino, y moderado por el Dr. Jaime Vela del Río, Director de la Escuela de Derecho de la Universidad Pontificia de México. En este panel además de revisar objetivamente los aspectos positivos y negativos de la Contrarreforma Educativa impulsada por este Gobierno, se puntualizaron los grandes desafíos de la gestión pública de la educación y la ciencia. También se vislumbró cómo las recientes reformas constitucionales coinciden con algunas insistencias propias de nuestro Magisterio, tal es el caso del interés supremo de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes; la educación integral; el valor de la dignidad humana; la equidad y la excelencia educativa; la educación para la primera infancia, entre otras.
El segundo día se inició con el análisis del documento "Educar para un humanismo solidario". Tanto los Doctores Guillermo Hurtado Pérez, Jorge Traslosheros Hernández y Reyes Tamez Guerra, señalaron, entre otros, la urgencia de humanizar la educación como se insiste en el citado Documento de la Congregación para la Educación Católica. Abordaron ampliamente el tema de la emergencia
antropológica y la confrontaron con la realidad educativa de México. Este panel estuvo moderado por el Pbro. Dr. Julián López Amozurrutia.
Enseguida, el Señor Obispo Enrique Díaz Díaz, presentó el muy reciente Documento de la Comisión
Bíblica Internacional sobre la Antropología Bíblica, aterrizando la necesidad de tener una visión
sapiencial sobre la educación, al reconocer que la persona es un ser creado, de eminente dignidad y
llamado a perfeccionarse durante toda su existencia, confrontándose con el Verbo Eterno, quien nos
revela la grandeza del ser humano, así como su vocación y sentido.
Posteriormente, se llevó a cabo una intensa y nutrida mesa de diálogo, coordinada por la Dra. Ma. de Lourdes Lavaniegos González, para abordar "Desafíos, novedades y espacios educativos concretos", con la participación de la Mtra. Aranzazú Alonso con el tema de la Primera Infancia; la Hna.
Mtra. Margarita Pérez Nerey, con la universidad católica de inspiración cristiana en el contexto cultural actual; el Pbro. Dr. Daniel Portillo Trevizo, con el cuidado y la protección de menores; el Lic. Leonardo García Camarena, con el tema de los padres de familia como primeros responsables de
la educación de los hijos, y el Mtro. Román Martínez Martínez, quien abordó el tema de educar innovando con el uso de las nuevas tecnologías.
Como constante de todos estos momentos de trabajo, reafirmamos la enorme exigencia de converger a una educación mucho más cercana a las realidades actuales de las familias y la sociedad de hoy. Apreciamos también la urgencia de modificar nuestros paradigmas que en muchas ocasiones son autorreferenciales y carentes de realismo.
También renovamos nuestro compromiso por educar más sólidamente, en la confianza de saber que no estamos solos, sino permanentemente asistidos por el Divino Maestro, quien nos llama a un profundo discernimiento sobre las necesidades concretas de los educandos a quienes queremos servir.
Finalmente, el Pbro. M. en C. Eduardo Corral Merino presentó, a nombre de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la CEM, diez conclusiones muy puntuales que se fueron recogiendo como constantes y puntos de acuerdo, durante todo el Encuentro:
1. La educación requiere hoy, valentía: “de formar personas disponibles que se pongan al servicio de la comunidad. El servicio es un pilar de la cultura del encuentro: Significa inclinarse hacia quien tiene necesidad y tenderle la mano, sin cálculos, sin temor, con ternura y comprensión, como Jesús se inclinó a lavar los pies a los apóstoles. Servir significa trabajar al lado de los más necesitados, establecer con ellos ante todo relaciones humanas, de cercanía, vínculos de solidaridad.
En el servicio experimentamos que hay más alegría en dar que en recibir (Cfr. Hch 20,35). En esta perspectiva, todas las instituciones deben interpelarse sobre la finalidad y los métodos con que desarrollan la propia misión formativa” (Papa Francisco, Convocatoria al Pacto Educativo Global).
2. La educación es el único camino para resolver las grandes brechas (económicas, sociales, políticas, culturales, de desarrollo humano), generadoras de violencia.
3. Toda educación exige corresponsabilidad de actores: La educación es una tarea de todos y para todos.
4. Los métodos, contenidos y gestión de la educación deben centrarse en la persona y su integralidad. La educación no se reduce al ámbito escolar. El centro de la educación es la persona humana, que tiene múltiples áreas, facetas, tiempos, circunstancias “Hay que humanizar la educación” (Educar para un Humanismo Solidario).
5. Educación y cultura van de la mano. No podemos educar en el aire, educamos de manera encarnada, por lo que hay que discernir constantemente la realidad cultura en la que nos movemos y estamos llamados a transformar.
6. La Iglesia ha servido durante más de 500 años en la educación. Lo ha hecho contra viento y marea. Es urgente retomar nuestra Tradición, ir más allá del conflicto y centrarse en el “acontecimiento” educativo.
7. Nosotros, tenemos un Divino Maestro, al Verbo Encarnado, al Logos, que “descubre al ser humano su identidad y la grandeza de su vocación” Es urgente ofrecer la antropología cristiana. Es necesario seguir, comprender y ofrecer el rico Magisterio de la Iglesia: el Documento de Aparecida, Educar para una Nueva Sociedad, Educar para un Humanismo Solidario, Varón y Mujer les Creó, Antropología Bíblica de la Comisión Bíblica Internacional, entre otros.
8. Salir al encuentro, comprometerse con los padres de familia y todos los espacios de educación no formal que educan los aspectos más sensibles de la persona, como la educación para la paz, la misericordia y el perdón, la libertad responsable, el cuidado del medio ambiente.
9. No nos estamos jugando solamente la vida humana, sino sobre todo, la posibilidad de comprender la grandeza de lo que es el ser humano.
10. Estamos llamados a “evangelizar educando y educar evangelizando”, sin embargo estos acontecimientos, deben siempre de re-significarse de acuerdo al misterio de la Redención, hoy, en una profunda escucha y actitud de diálogo con el mundo.
Se puntualizó que todas estas conclusiones deben ser leídas no solo desde una visión pastoral, sino sobre todo desde la vida espiritual de cada actor de la educación, particularmente desde la encíclica social del Papa Emérito Benedicto XVI, Caritas in Veritate, y por supuesto de las Exhortaciones Apostólicas Evangelii Gaudium y Gaudete et Exusltate, del Papa Francisco.
Agradecemos a todos los Responsables de Provincia y Diócesis de Pastoral Educativa y/o de Cultura; a los organismos que nos ayudaron a organizar este Encuentro, especialmente a la Universidad Pontificia de México y la Asociación Mexicana de Instituciones de Educación Superior de Inspiración Cristiana en su Vocalía de Formación Humanista; a la Arquidiócesis Primada de México, a la Confederación Nacional de Escuelas Particulares, la Unión Nacional de Padres de Familia, así como a la Secretaría General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, sus facilidades para promover y organizar este Encuentro.
El documento conclusivo fue firmado por + Enrique Díaz Díaz Obispo de Irapuato y Responsable de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la CEM; el Pbro. Dr. Mario Ángel Flores Ramos
Rector de la Universidad Pontificia de México y Responsable de la Vocalía de Formación Humanista de la AMIESIC.
Así mismo, el Pbro. M. en C. Eduardo J. Corral Merino, Secretario Ejecutivo y el Pbro. Alejandro Lara Navarro, Secretario Adjunto.