El Cementerio o camposanto de Santa Cruz
Historiador de Santa Cruz de Juventino Rosas
En el pueblo de Santa Cruz o en la ciudad o el municipio de Santa Cruz de Juventino Rosas, han tenido un cementerio o camposanto del Templo de La Santa Cruz, y cuatro panteones: San Antonio, Municipal, Rincón de Centeno y Municipal. Este artículo es una historia del cementerio, y posteriormente se escribirá un artículo de los panteones.
Trámites de la fundación de un pueblo-doctrina
El 9 de enero de 1717, el virrey de Nueva España, Baltasar de Zúñiga Guzmán Sotomayor y Mendoza le ordena al obispo de la Provincia Michoacana, mandar un vicario y erigir una capilla provisional; para atender sus necesidades religiosas, a los españoles, criollos, mestizos e indígenas otomíes, trabajadores o arrendatarios de la hacienda de Comontuoso; en afectación a unos de sus terrenos, de la jurisdicción de la alcaldía mayor de Celaya, en el reconocimiento y diligencias para la asignación de solares; y posteriormente, a colocar las primeras piedras de un templo y el virrey otorgar en una cédula virreinal la fundación y el nombre de un pueblo doctrina.
Por orden del virrey el 12 de junio de 1717, José de Villa y Urrutia, el teniente general de partido de la alcaldía mayor de León, con su regimiento llega a la hacienda de Comontuoso e intenta tener una conversación con Margarita Cano la dueña, quien se negó a atenderlo; por lo que con orden virreinal, acompañado de su regimiento, trabajadores y arrendatarios españoles, criollos, mestizos e indígenas y un vicario, en semanas hacen trabajos de reconocimientos, diligencias y erigir una capilla, afectando 600 varas y terrenos comunales, al norte de la casa grande de esta hacienda, en un valle al pie de la Sierra de Codornices.
Así, el 21 de septiembre de 1717, fue la asignación de los solares, para una plaza, un templo, una alcaldía y casas, por manzanas, y la colocación de la primera Santa Cruz. Concluida ya una capilla en el centro de la plaza (en donde actualmente está el quiosco del Jardín Principal). Provisionalmente, a este pueblo doctrina se le llamó como vicaría de Comontuoso.
Construir el templo y la cédula virreinal de la fundación y el nombre
El 9 de julio de 1718, el virrey de la Nueva España ordena al obispo de la Provincia Michoacana, ejecución para que se erigiera un templo, colocando las primeras piedras en su solar en la vicaría de Comontuoso, que se comenzó a construir. El 9 de octubre de 1718, el virrey Baltasar de Zúñiga Guzmán Sotomayor y Mendoza, con cédula virreinal otorga conceder licencia de la fundación y el nombre del pueblo de Santa Cruz de Comontuoso.
Lic. Víctor Manuel García Flores, autor del presente artículo. |
Cementerio o camposanto
El cementerio o camposanto, siendo sinónimos, era un espacio físico en donde se depositaban cadáveres, por ser un terreno consagrado o campo santo; pero en la colonia de Nueva España, no tenían mausoleos, sepulcros, monumentos, criptas, nichos o tumbas; teniendo solamente, algunas sepulturas, hoyos o fosa, sin lápidas.
Por supuesto que desde Egipto en la Edad Antigua, ya había mausoleos, monumentos y sepulcros de los muertos faraones y su dinastía, pero no de los esclavos; y en la Edad media en Inglaterra y en otras naciones del norte de Europa, ya tenían capillas o iglesias con cementerios teniendo tumbas, criptas, nichos, sepulcros y mausoleos para los difuntos reyes y su monarquía, pero a los humildes, no.
En la Edad Moderna, en España y sus colonias, ya teniendo capillas o iglesias con cementerio, pero a los españoles, criollos y mestizos siendo monarquistas que morían, sus cuerpos los sepultaban en el piso del interior de la iglesia con alguna placa; y a los pobres mestizos e indígenas que fallecían, sus restos los enterraban en hoyo o fosa sin placa ni lápida en el camposanto, el actual atrio.
Fundación oficial del pueblo de Santa Cruz de Comontuoso
En 1721 aunque seguía construyéndose el templo del pueblo de Santa Cruz de Comontuoso, todavía no terminaba; pero como el virrey, Baltasar de Zúñiga Guzmán Sotomayor y Mendoza, sabía que en 1722 iba a concluir su misión virreinal, ordenó que ya se diera la misa que bendijera y elevara el santísimo en el altar del templo que sustituiría a la capilla original en la fundación oficial como pueblo doctrina.
Así, el domingo 3 de mayo de 1721, el Día de la Santa Cruz, por todavía no terminar el templo, se dio la misa en un altar colocado afuera (en el atrio actual), por donde estaba la primera Santa Cruz de 1717, bendiciendo y elevando el santísimo en el altar, en la fundación oficial del pueblo de Santa Cruz de Comontuoso.
El Templo de La Santa Cruz
El 14 de septiembre de 1723, por terminar de construir el templo, se dio una misa con autoridades eclesiásticas bendiciendo al santísimo y sustituyendo a la capilla provisional y utilizando ya el Templo de La Santa Cruz.
¿En dónde estaba el Templo de La Santa Cruz? Estaba en el poniente del solar, al lado oeste de la actual Parroquia de La Santa Cruz. Los jóvenes no lo recuerdan, pero quienes vivimos en los sesenta y setenta del siglo XX hemos de recordar que a un lado de la parroquia, al oeste, había un muro de adobe hasta la esquina, en donde está la calle Manuel Doblado y en esa esquina otro muro de adobe hacia el norte en la misma calle, hasta el Templo de La Encarnación abandonado antes.
En el centro de ese muro frente al atrio había un marco de cantera alto, con una puerta grande de madera, con más de doscientos años, que era la entrada del Templo de La Santa Cruz; que adentro, tenía nada más un cuarto alto extenso guardando varios objetos litúrgicos y atrás del cuarto había otro muro de adobe y a su oeste, otro pequeño marco y una puerta para entrar a la cancha de básquetbol.
En el siglo XX, no tenía torre, ni cúpula, ni altar y nada más quedaban, esos muros, ese cuarto grande con marcos y puertas, y una cancha, ahí estaba el Templo de La Santa Cruz. A inicio de los setenta, se tumbaron los muros, se quitaron el marco de cantera y la puerta de madera altos, antiguos, (¿en dónde estarán?), y se creó una nueva cancha de basquetbol y en lugar de los muros exteriores colocaron pilares de cantera y barandal en la calle Manuel Doblado y barandal frente al atrio, y principalmente, arreglaron y volver a utilizar el Templo de La Encarnación.
Pero años después, a fines de la década de los setenta e inicio de los ochenta, quitaron la cancha de básquetbol, quitaron el barandal frente al atrio y construyeron escaleras, nacieron unos árboles, y colocaron faroles; y ahora, es la parte poniente del atrio de la Parroquia de La Santa Cruz y el frente del Templo de La Encarnación.
El cementerio o camposanto del Templo de La Santa Cruz
El resto del solar en donde se construyó el Templo de la Santa Cruz, se convirtió en el cementerio. Originalmente el solar del templo, además de lo que tiene actualmente, le pertenecía también toda la manzana de las actuales calles, Baltasar de Zúñiga, Isabel la Católica y Corregidora, que se le quitó a la iglesia católica por las Leyes de Reforma del siglo XIX.
Los cadáveres que estuvieron sepultados o enterrados, pueden seguir estando debajo de la parroquia, del atrio y en las casas o negocios de la manzana de las calles Baltasar de Zúñiga, Isabel la Católica y Corregidora.
Como ya se mencionó, en los cementerios de la colonia española, solamente en el piso de las iglesias se sepultaban los restos de los españoles, criollos y mestizos ricos en una placa; y en terreno a su lado de las iglesias, se enterraban los cuerpos de mestizos e indígenas humildes, sin mausoleos, sepulcros, monumentos, criptas, nichos o tumbas, sepultándolos solamente en hoyo o fosa sin placa ni lápida, en el camposanto, actualmente como atrios; e inclusive en el terreno del camposanto, se llegaron a enterrar cadáveres generalmente, sin sepultura propia.
Así sucedió en el pueblo de Santa Cruz de Comontuoso, placas en el piso del templo y sin tumbas alrededor del templo, teniendo solamente hoyos o fosas.
El cementerio o camposanto del Templo de La Santa Cruz en la colonia de Nueva España, funcionó desde que era capilla en 1717 y siendo ya templo desde 1723 a fines del siglo XVIII o inicio del siglo XIX.
En 1787, por razones sanitarias por epidemias de fiebre amarilla y vómito negro, el rey de España Carlos III en cédula real dicta prohibiendo enterrar los cuerpos de los finados en las iglesias, y ordena a los ayuntamientos y a las colonias de América, construir cementerios fuera de las poblaciones, en sitios ventilados con vientos y alejados de las casas de los pueblos, las villas y las ciudades. La mayoría de las colonias cumplen esta cédula real hasta fines del siglo XVIII o inicio del siglo XIX.
Construir la parroquia y derrumbar la capilla, el templo y el cementerio
En 1798 inician los trabajos de construcción del templo principal, la actual Parroquia de La Santa Cruz, que se detiene a la recién terminación de la Guerra de la Independencia en 1822; y en 1824, se concluye a construir la parroquia que se terminó la construcción en 1842.
En el pueblo de Santa Cruz, la capilla original seguía derrumbada en el centro de la plaza en México Independiente, pero por las guerras contra otras naciones y entre liberales contra conservadores en décadas, a fines del siglo XIX, se destruye la capilla para crear con árboles la Plaza de las Armas.
El Templo de La Santa Cruz siguió funcionando hasta 1842, cuando se concluyó la construcción de la Parroquia de La Santa Cruz. Es probable, que aunque ya se daban los servicios eclesiásticos en la parroquia, aún se daban también servicios en el templo, pero a fines del siglo XIX en el porfiriato, dejó de funcionar y empezó a derrumbarse.
Construir el Panteón San Antonio con capilla
Al prohibir los cementerios de las iglesias el reino de España, en Europa y en las colonias de América, a fines del siglo XVIII y principio del siglo XIX, en el pueblo de Santa Cruz de Comontuoso de Nueva España, dejó de funcionar el cementerio del Templo de La Santa Cruz y como México independiente en el pueblo de Santa Cruz, se creó el Panteón San Antonio con capilla, que siguió con sepulturas debajo del piso de la capilla y a su lado en el terreno, pero ahora si con tumbas y lápidas.
Los restos de los cadáveres de santacrucenses del cementerio han de seguir estando debajo de la Parroquia de La Santa Cruz, del atrio, y de la manzana que le quitaron a la iglesia católica.