Juan Antonio Ayala
-Un gobierno municipal que gasta millones de pesos en entretenimiento, pero cuestiona 30 mil pesos dados a la Cruz Roja
-Los incidentes delictivos con armas de fuego en Salvatierra, en aumento
-Ante la falta de capacidad de respuesta de la Cruz Roja, servicios privados de ambulancia han comenzado a operar en la región, inalcanzables para una buena parte de la población
El presidente municipal de Salvatierra, Guanajuato, utilizó su espacio en la conferencia “La Mañanera” para señalar a la Cruz Roja Mexicana, con base en esta ciudad, como responsable de no cumplir con el acuerdo de atender al menos 60 servicios de emergencia al mes a cambio de $30,000 pesos de ayuda (aprox. menos de $1,000 por día).
Sin embargo, esta afirmación merece un análisis más profundo, pues no solo desvía la atención de las fallas estructurales de su administración, sino que también ignora los desafíos que enfrenta la Cruz Roja y el sistema de emergencias en la región. Hoy, desenmascaramos esta narrativa y reflexionaremos sobre las verdaderas responsabilidades.
La Cruz Roja Mexicana es una institución humanitaria que depende en gran medida de donaciones, voluntarios y subsidios gubernamentales para operar. Aunque recibe apoyo de los municipios, estos recursos son limitados y no siempre cubren las necesidades básicas.
En el caso de Salvatierra, Gto, el subsidio que recibe la Cruz Roja no es suficiente para mantener un servicio continuo y de calidad, especialmente en una región donde los incidentes de violencia y emergencias médicas van en aumento.
Además, la Cruz Roja ha enfrentado amenazas y ataques directos a sus unidades, lo que ha puesto en riesgo la vida de sus paramédicos. ¿Cómo se espera que respondan a emergencias si ni siquiera cuentan con la seguridad necesaria para operar? Esta situación no solo desmotiva al personal, sino que también limita su capacidad de actuar en zonas de alto riesgo.
Ante la falta de capacidad de respuesta de la Cruz Roja, servicios privados de ambulancia han comenzado a operar en la región. Sin embargo, estos servicios no son accesibles para toda la población, ya que suelen ser costosos y no están regulados de manera eficiente. Esto deja a gran parte de la ciudadanía en un limbo, donde la atención médica inmediata depende de la suerte o la capacidad económica.
Por otro lado, el sistema de emergencias 911 en Salvatierra Pueblo Mágico presenta fallas críticas. La falta de información en tiempo real, la poca coordinación entre las autoridades y los servicios de emergencia, y la ausencia de un protocolo claro para atender llamadas, han generado retrasos en la respuesta de ambulancias. Esto no es culpa de la Cruz Roja, sino de una administración municipal que no ha invertido en modernizar y fortalecer este servicio vital.
Mientras el presidente municipal señala a la Cruz Roja, los incidentes delictivos con armas de fuego siguen aumentando en Salvatierra. La administración actual no ha logrado reducir estas estadísticas, y en cambio, ha destinado millones de pesos a eventos de entretenimiento que solo duran unos días o unas horas. ¿De qué sirve una feria, un concierto o un desfile, si no se garantiza la seguridad y la salud de los ciudadanos? Las prioridades están claramente desviadas.
Otros municipios han optado por crear sus propios servicios de emergencia, lo que les permite tener un mayor control y eficiencia. Salvatierra, Guanajuato, en cambio, sigue dependiendo de la Cruz Roja y de servicios particulares, sin una estrategia clara para mejorar la situación.
¿Por qué no se ha considerado esta opción? ¿Por qué no se invierte en salvar vidas en lugar de culpar a quienes intentan hacerlo con recursos limitados?
Termino este escrito con una pregunta dirigida a presidencia municipal y a la sociedad en general: ¿Qué vale más, un día de diversión o una vida salvada? Mientras se sigan ignorando las necesidades reales de la población y se siga culpando a quienes trabajan en condiciones adversas, Salvatierra no avanzará, sus hijos(as) seguirán muriendo.
Es hora de que la administración municipal asuma su responsabilidad, deje de buscar chivos expiatorios y trabaje en soluciones concretas para garantizar la seguridad y la salud de todos.
La Cruz Roja no es el problema; el problema es un sistema que no funciona y una administración que no prioriza lo que realmente importa. ¿Estamos dispuestos a cambiar esto? La respuesta está en nuestras manos.
Una forma igualitaria de gobernar el entretenimiento como prioridad. #MetroNewsMx
Publicar un comentario