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Periódico La Jornada
Viernes 22 de noviembre de 2019, p. 7
París. Yo acuso, filme más reciente de Roman Polanski, sobre el juicio del militar judío Alfred Dreyfus, lidera la taquilla en Francia una semana después de su estreno, pese a los llamamientos al boicot contra el cineasta francopolaco, acusado recientemente de una nueva violación.
Con más de 501 mil entradas vendidas, se trata del mejor arranque de su carrera
, señaló el miércoles el sitio CBO Box Office, a cargo de la clasificación, si bien los datos no están disponibles para los filmes que Polanski realizó antes de 1995.
Hasta ahora, su mejor estreno en Francia había sido La novena puerta (499 mil 344 entradas en la primera semana en 1999), Oliver Twist (482 mil 752 en 2005) y El pianista (379 mil 604 en 2002).
Yo acuso, que retoma la historia del militar judío Alfred Drey-fus acusado erróneamente de espionaje a finales del siglo XIX en Francia, se alzó con el Gran Premio del Jurado en la Mostra de Venecia.
Nueva acusación
Su estreno en Francia estuvo marcado por llamados al boicot después de que una fotógrafa francesa, Valentine Monnier, asegurara a la prensa que el director francopolaco la violó en 1975, cuando ella tenía 18 años. Polanski lo negó por medio de su abogado.
El director está prófugo de la justicia de Estados Unidos, donde en 1977 fue acusado de haber violado a una menor de 13 años.
Otras mujeres han asegurado en años recientes haber sido víctimas de agresiones sexuales.
Con motivo de la salida de Yo acuso en Internet circuló #BoycottPolanski, en algunos cines donde se proyectaba se registraron protestas y responsables políticos, como la secretaria de Estado Marlène Schiappa, aseguró que no iría a verla.
La nueva acusación contra el director llevó además a sus pares franceses a emprender sus primeras sanciones. La Sociedad Civil de Autores Directores y Productores propondrá en su asamblea general suspender a cualquiera de sus miembros que haya sido acusado por la justicia.
En Estados Unidos, Polanski fue expulsado en 2018 de la Academia del Cine, por la política menos tolerante de Hollywood que impuso el #MeToo.
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